jueves, 2 de septiembre de 2010

6,7,8: requiem para el periodismo

Todas las noches podemos ver en la pantalla del canal 7, el programa "6,7,8" conducido por Luciano Galende, y que cuenta con la participación de los panelistas Orlando Barone, Sandra Russo, Carla Czudnowsky, Carlos Barragán y Cabito Masa Alcántara.
El mismo trata los temas de la actualidad política desde la perspectiva de los medios de comunicación social. En teoría, es un espacio en dónde se analiza cómo los medios enfocan cada tema.
En realidad, es un brazo mediático de una red de operaciones cuya cabeza está en la Casa Rosada. Los asuntos debatidos son directamente puestos a consideración según la ponderación que realiza el gobierno nacional.
El tono del programa es de una obcecuencia sólo comparable a las bravatas lanzadas por José Gómez Fuentes durante la Guerra de Malvinas. Las intervenciones de los periodistas -más que un intercambio de opiniones- se parece más a una carrera de chupamedias, guionada desde los escritorios gubernamentales.
Recientemente, el Jefe de Gabinete Aníbal Fernández reconoció -con una dosis de cinismo- que él mismo se ocupa de la producción del programa.
En rigor, 6,7,8 tiene como único objetivo desacreditar a los principales multimedios -en especial a Clarín- y a todos los periodistas que trabajan en ellos.
Este programa es uno más de los distintos caminos que transita el gobierno en su red de operaciones que realiza contra el grupo Clarín. Lo anima la certeza de que si no logra hundirlo antes de mediados de 2011, el kirchnerismo no tendrá posibilidades de permanecer en el poder más allá de esa fecha, atento la gran influencia que tiene el multimedios sobre la opinión pública.
A ello se suma la proliferación de medios gráficos y audiovisuales privados que subsisten sólo por la abundante pauta publicitaria oficial de la que gozan.
Pero 6,7,8 es apenas una muestra de un sistema. Como nunca desde 1983, los medios del Estado son medios del gobierno, puestos al servicio de la facción que circunstancialmente le toca ejercer el poder.
La Argentina necesita cambiar este paradigma, pasando a tener medios del Estado -o sea de toda la comunidad- para difundir todo aquéllo que promueva la cultura nacional y que los medios privados no incluyan en sus contenidos.
Por ello, los medios estatales deber ser gerenciados por funcionarios designados por el Poder Ejecutivo con acuerdo del Parlamento, con participación de los gremios involucrados y las ONGs especializadas.
Así estarán preservados de los vaivenes partidarios, y al servicio verdadero del pueblo.
Mariano Rovatti

Mirá el video de Orlando Barone hablando sobre su período como periodista de Clarín durante la dictadura:
http://www.facebook.com/video/video.php?v=1411673325685

El tango en la educación

Claudio Tagini, presidente de Proyecto Tango, nos cuenta sobre la aprobación de su proyecto de ley que introducirá el 2 x 4 en la currícula escolar:


¿Nos querés contar cómo se logró la aprobación en la Legislatura porteña de tu proyecto para incluir el tango en la currícula escolar?


Lo tomó en sus manos el diputado [Raúl] Puy [Diálogo por Buenos Aires, presidente de la Comisión de Cultura] quien hizo la presentación en la Legislatura. Primero se realizó una reunión con los asesores de los distintos bloques políticos que aprobaron llevarlo al recinto donde fue aprobado por unanimidad y ahora ya está en manos del poder Ejecutivo.

Conseguimos un apoyo muy fuerte a través de la diputada [María José] Lubertino que apoyó el proyecto que había presentado Puy y colaboró con él Gabriela Goñi Miguel quien realmente demostró grandes condiciones organizativas porque fue la que habló con Susana [Rinaldi], con la Orquesta [de Tango de la Ciudad], fue la que consiguió el 80% de la presencia mediática que hubo ahí. Realmente nos ha resuelto temas muy importantes.

¿Y todo este apoyo mediático es fundamental para su aprobación?

El apoyo mediático vino luego de que se aprobó en el recinto. Una vez aprobado el proyecto en el recinto se tomó la decisión de darlo a conocer públicamente para que esto tenga una trascendencia más allá de dónde se discutió el tema.

Pero resta su implementación. Hay algún sector político que esté acompañando más o menos el tema? Concretamente, los que manejan el Ejecutivo, el PRO, ¿acompañan la propuesta?

No sabemos. Los legisladores dijeron que sí en su momento porque hubo una aprobación unánime. Lo que no sabemos es que va a pasar en este camino del proyecto hacia arriba, cuál será la apoyatura que va a tener. Esto ahora está en manos del poder Ejecutivo, lo tienen que resolver la gente de Educación, de Cultura, Macri…

Y esto les conviene, es beneficioso para la gestión…

Esto es muy beneficioso para la gestión, pero ellos no hicieron la experiencia, nos tienen que creer. Porque cuando nosotros hicimos las Tanguereadas Infantiles como una herramienta que utilizamos para poner en marcha a centenares de chicos ocurrió un hecho que mueve a la reflexión. Se produjo un fenómeno muy particular. La zona del Abasto dependía del CGP 2 Sur (hoy CGPC3) y habíamos conseguido ahí un espacio físico dónde funcionar como Proyecto Tango. Veníamos reuniéndonos en bares, escuelas…



¿Pero tuvieron una sede propia en Lavalle, entre Mario Bravo y Bulnes?

Después. Pero al principio no teníamos nada. Nos ofrecieron ese espacio merced a una gestión que realizó Antolín Magallanes, en ese entonces delgado comunal, y eso nos abrió las puertas de la zona. Y en esta confusión que voy a contar ahora me apoyo en mi idea de la ayuda que significa para la gestión. Nosotros visitábamos las escuela y a través de los maestros y los padres, que vinculábamos en las puertas de las escuelas, habremos conseguido llegar a 500 personas en este período que hicimos esta difusión. De esas 500 personas se terminaron anotando 300 chicos en las escuelas de la zona. Fue algo realmente emocionante ver lo que pasaba. Los sábados a las dos de la tarde los chicos estaban citados a las escuelas para aprender a bailar el tango y para ver quien tenía idea de cómo cantar un tango, o dibujar temas de tango. Pasaba que a las dos iban a aprender y a las cinco ya estaban en el patio disputando las rondas del certamen. Cosas que uno las cuenta y parecen de novela, pero son ciertas.

Lo más importante de todo esto es lo que cuento ahora. Una vez que se hicieron las Tanguereadas Infantiles vinieron las elecciones en la ciudad en el 2001. De los 16 CGP que habían en la ciudad en ese entonces -ahora son 15 comunas- la gestión triunfó en uno sólo. Y ese espacio geográfico fue el CGP 2 Sur. Y les preguntábamos a los padres de los pibes porqué habían votado a la gestión y nos decían “es que Uds. se ocuparon de los pibes”. Confundían así la gestión con Proyecto Tango.



¿Querés contar un poco en qué influiría esto en la escuela de los chicos?

La propuesta es que esto atraviese la currícula escolar. Tiene que atravesar la historia argentina, las ciencias sociales, la literatura, la poesía, la educación física, la gimnasia. En todas estas disciplinas, y en alguna que puedo olvidar ahora, el tango tiene presencia, viva presencia. Y la tuvo desde su creación. Porque el tango aparece en escena en 1880 y si revisás la currícula nunca hubo nada de tango en la escuela, salvo por voluntad de algún maestro.



Es increíble que sea necesario incorporar una ley para incluir en la escuela algo tan nuestro…

Tenemos nuestras ideas de por qué pasó ésto, por qué el tango desapareció de escena en los 50 o 60, y pensamos que obedece a razones políticas. Pero profundizar en la imagen que uno tiene de las cosas que ocurrieron y decir que esas con certeza son las causas, es muy atrevido. Porque uno puede creer que las cosas fueron de una manera y pueden haber sido de una manera parecida. Pero estoy seguro que si esto penetra en la currícula escolar los chicos van a tener contacto con el tango desde el lugar natural, que es con los maestros. La historia del tango la tienen que aprender en la escuela.

Después, cuando lleguen las Tanguereadas Infantiles a la escuela -que es el otro elemento clave en esta historia- los chicos se van a anotar para cantar, a los coros, para bailar, para todas las actividades que desarrollen las Tanguereadas. ¿Y qué va a pasar? Van a acercar a los padres. Porque nosotros trabajamos concretamente para que el tango retorne a la familia. El tango es un elemento cultural.



Esto puede ayudar a darle un poco más de manija al nuevo tango, muchas veces de buen nivel, que tiene poca difusión…

Esto no lo vamos a lograr con el trabajo de Proyecto Tango. Pero puede influenciar. Hoy vos agarrás a mil padres y conversás con ellos para saber el conocimiento que tienen ellos del tango y en general es muy superficial. Nosotros logramos que de los 10.600 chicos que participaron en las Segundas Tanguereadas Infantiles que hicimos en la Capital, alrededor de mil doscientos padres empezaran a aprender a bailar tango, y comenzaron a ir a la milonga, a comprar compactos de tango, libros y a investigar a cerca del tango, cosa que no habían hecho hasta el momento. Porque su cultura musical es ajena al tango.

No estamos en contra del rock, ni del bugi bugi, ni de todas esas disciplinas que acompañaron ese período. Para nosotros lo más importante es que el tango es la expresión poética y bailable de la cultura de esta ciudad. Y no hay otra música que la representa tal como lo hace el tango.

Entrevista realizada por Rafael Sabini


Fuente: http://www.revistaelabasto.com.ar/