Causa preocupación en el ambiente musical de la ciudad de Buenos Aires, la dificultosa tramitación de espectáculos de música, vigente en la ciudad de Buenos Aires.
Cada vez que se desarrolla un espectáculo con músicos y/o cantantes en vivo, debe solicitarse el permiso correspondiente a la Dirección General de Habilitaciones y Permisos de la Ciudad de Buenos Aires.
La falta de dicho permiso genera la clausura de la actividad o del establecimiento, según el caso.
Para la organización de eventos de tango o de folclore, dicha exigencia carece totalmente de sentido.
La misma fue pensada para otro tipo de espectáculos, en donde los artistas y el público son exaltados a propósito como forma de hacer más atractivo el show. Así, el conocimiento previo del mismo por parte del gobienro, permite en teoría tomar mayores recaudos en materia de seguridad.
En el tango y el folclore es clima totalmente distinto, El volumen de la música es más bajo, el público no danza frenéticamente sino siguiendo una coreografía relativamente conocida, las luces son tenues y estables.
Además, la organización de espectáculos de tango y folclore habitualmente no tienen el apoyo necesario de patrocinantes o grabadoras, recurriéndose a menudo a la buena voluntad de un puñado de "militantes" de nuestra música popular.
Entendemos que el tango y el folclore -expresiones genuinas de nuestro acervo cultural- deben ser exceptuadas de estos requisitos.
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